Cualquier dueño de un perro puede responder con confianza a la pregunta de qué emoción está experimentando actualmente su mascota.
Por ejemplo, si un perro se da vuelta, lo más probable es que algo lo ofenda, y si la mascota gira, agita activamente la cola y ladra fuerte, probablemente se alegra de ver a su ser querido.
Sí, sí, los perros tienen muchos “medios” para expresar sus sentimientos y, a veces, se pueden ver lágrimas reales en sus ojos.
Sin embargo, ¿significa esto que el animal ahora está muy molesto?
La respuesta es no: las lágrimas de los perros no tienen nada que ver con sus experiencias internas. Tienen otra función, que es la de hidratar la córnea y limpiar los ojos.
Por tanto, cuando te parezca que el perro está llorando, lo más probable es que las lágrimas hayan sido provocadas por algún motivo patológico.
Por ejemplo, el lagrimeo podría deberse a la entrada de un objeto extraño en el ojo, una lesión, alergias, etc.
Normalmente, la secreción de los ojos de un perro es escasa y transparente, y se acumula en las comisuras de los ojos del animal. Recuerda limpiarlos cada pocos días utilizando un paño y una loción especialmente creada para este fin.