Resulta que el masaje es útil no solo para los humanos, sino también para nuestros hermanos pequeños.
Si hablamos específicamente de gatos, las caricias relajantes pueden mejorar el contacto entre el dueño y su mascota, por lo que será posible establecer una relación más cálida.
Además, el masaje es simplemente insustituible si el gato ha sufrido una lesión: le ayuda a recuperarse más rápido.
Por último, el masaje puede considerarse la panacea para los gatos en la vejez, ya que ayuda a mejorar la flexibilidad de su cuerpo.
La técnica del masaje no es complicada, pero si no confías en tus habilidades recuerda que siempre puedes buscar la ayuda de un especialista.
El masaje debe comenzar con ligeras caricias.
Utilice las yemas de los dedos para realizar movimientos circulares, comenzando desde la cabeza y luego bajando suavemente hasta el cuello. Muévete lentamente hacia abajo y hacia abajo.
Se debe masajear la espalda hacia la cola, que también forma parte de la columna, y hacia las patas.
Tenga en cuenta: este procedimiento tiene contraindicaciones, entre ellas fiebre, oncología, esguince, fractura, etc.