Se sabe que los periquitos producen una variedad de sonidos.
Por ejemplo, además de las canciones, a veces puede escaparse de su pico un grito agudo. Lo más probable es que el loro quiera demostrar que necesita comida o que le dejen salir de la jaula.
Pero incluso si escucha esos sonidos temprano en la mañana y tiene prisa por ir a la jaula con un paquete de comida, no se apresure a tratar a su mascota; tal vez ahora se esté aclarando la garganta antes de cantar.
Los fuertes gritos, que van acompañados del batir de alas a los lados, también pueden indicar la indignación del pájaro. Además, cuanto más fuertes son los aplausos, mayor es el grado de perturbación.
Si escucha gritos fuertes y alarmantes, verifique inmediatamente que el loro se encuentre bien. Si se detienen bruscamente, significa que tu mascota tiene miedo de algo.
Pero un chillido lastimero indica que el pájaro no puede acostumbrarse a él, por ejemplo, a un nuevo entorno o a las personas que lo rodean.
A veces, los dueños de aves simplemente están seguros de que sus mascotas pueden maullar. De hecho, el loro emite esos sonidos si le gusta la golosina y también cuando quiere comer algo sabroso.
Pero se puede adivinar que el loro está de buen humor por sus arrullos y cantos.