Los gatos son animales asombrosos que pueden ser a la vez gentiles y salvajes, cariñosos e independientes, tranquilos y juguetones.
Pero si alguna vez te has despertado con tu gato acariciándote, maullando en tu oído, mordisqueándote la nariz o simplemente mirándote con esos ojos penetrantes, probablemente te habrás preguntado: ¿Por qué hace esto?
Tu gato puede tener varias razones para despertarte de diversas formas.
ella quiere comida
Los gatos tienen un mecanismo de reloj interno que les indica cuándo es hora de comer.
Si alimentas a tu gato según un horario, es posible que se acostumbre a una hora determinada y exija comida cuando llegue. Y si alimentas a tu gato cuando te lo pide, puede pensar que siempre estás dispuesto a darle un premio.
ella quiere atención
Los gatos son criaturas sociales que necesitan interactuar con otros gatos o personas. Si tu gato se siente solo o te extraña, es posible que intente despertarte para jugar con él o acariciarlo.
Esto es especialmente cierto para los gatos que pasan mucho tiempo solos en casa o que no tienen otras mascotas como compañía.
ella quiere jugar
Los gatos son animales activos a los que les encanta cazar y perseguir a sus presas. Para ellos no es sólo entretenimiento, sino también un instinto.
Si su gato no recibe suficiente estimulación física y mental durante el día, puede sentirse abrumado por la energía y buscar salidas por la noche.
En este caso, tu gato puede considerarte su juguete e intentar obligarte a unirte a su diversión.
ella quiere proteccion
Los gatos son animales sensibles que pueden reaccionar ante diferentes sonidos, olores o movimientos a su alrededor.
Si su gato se siente estresado o temeroso debido a algo dentro o fuera de su casa, es posible que busque consuelo o apoyo en usted. En este caso, tu gato puede acurrucarse contigo o ronronear en tu oído para sentirse más seguro.
No creas que tu gato te molesta a propósito cuando te despierta de diferentes maneras. Ella simplemente está expresando su amor y deseo de comunicarse contigo.
Los gatos no son animales simples, pueden sentir y pensar. Por eso, si tu gato no te deja dormir, intenta entenderlo y llegar a un acuerdo con él. Es posible que puedas desarrollar una relación más armoniosa con tu amigo peludo.