Un perro es el mejor amigo del hombre y se alegra de nuestra atención y cariño.
A muchas personas les gusta acariciar a los perros en la cabeza, considerándolo un signo de bondad y cariño.
¿Pero sabías que el perro puede percibir tal acción de una manera completamente diferente? ¿Y por qué nunca deberías acariciarle la cabeza a un perro si no te es familiar?
¿Cómo entienden los perros una palmadita en la cabeza?
Los perros son descendientes de los lobos salvajes, que tienen su propia jerarquía y reglas de comportamiento en la manada. Una de estas reglas es un gesto de dominación, cuando un perro fuerte pone su pata sobre la cabeza de uno débil.
Así, muestra su superioridad y exige sumisión. En este caso, un perro débil aplana las orejas y la cola, baja la cabeza y mira hacia otro lado.
Cuando una persona acaricia la cabeza de un perro, inconscientemente puede repetir este gesto de dominancia.
El perro puede percibir esto como una amenaza o un insulto, especialmente si no conoce a la persona ni confía en ella. El perro puede sentir miedo, ira o agresión y reaccionar mordiendo o ladrando.
Por supuesto, no todos los perros responden de la misma manera a una palmadita en la cabeza. Mucho depende del carácter, raza, crianza y socialización del animal.
Algunos perros pueden mostrarse tolerantes o indiferentes a esta acción, especialmente si están acostumbrados a ella desde que son cachorros. Otros perros pueden ser felices y juguetones si asocian una palmadita en la cabeza con estímulo o atención.
¿Cómo acariciar a un perro correctamente?
Si quieres mostrarle tu amor y cuidado a tu perro, entonces es mejor elegir una forma diferente de cariño. En lugar de acariciar la cabeza de tu perro, puedes:
- Acaricia al perro en el cuello, el vientre o la espalda. Esto ayudará a relajar y calmar al animal y fortalecer su vínculo.
- Rasca a tu perro detrás de las orejas o debajo de la barbilla. Esto provocará sensaciones agradables y placer en el perro y también estimulará la producción de oxitocina, la hormona del amor y la confianza.
- Dale a tu perro besos o abrazos ligeros. Esto le mostrará a tu perro tu cariño y respeto, y reducirá el estrés y la tensión. Sin embargo, no a todos los perros les encantan estas muestras de afecto, por lo que debes observar su reacción y no insistir si se dan la vuelta o huyen.
- Juega con el perro o dale juguetes. Esto ayudará a desarrollar la inteligencia, las habilidades motoras y las habilidades sociales de su perro, además de fortalecer su amistad y confianza.
Por qué nunca debes darle palmaditas en la cabeza a un perro y a qué puede conducir esto es una pregunta cuya respuesta vale la pena conocer. Los perros son animales sensibles e inteligentes que pueden comprender nuestros gestos y emociones.
Por tanto, es necesario respetar su espacio y preferencias, y estudiar su lenguaje corporal y comportamiento. Entonces podrás establecer una relación armoniosa y feliz con ellos.