Los amantes de los gatos argumentan que los gatos no pueden ser castigados, que esto puede arruinar la relación con su mascota y que es necesario actuar con persuasión.
Los expertos tienen un punto de vista diferente al respecto. Resulta que a veces todavía vale la pena intervenir y, como medida preventiva, utilizar un atomizador y una voz severa.
La felinóloga Olga Tarnovskaya habló sobre cómo castigar adecuadamente a los gatos en una entrevista con la emisora de radio “ Moscow Speaks ”.
De hecho, los gatos responden al proceso educativo, pero no pueden recordar mucho de él. Por tanto, el número de prohibiciones debería ser limitado.
En total, debes intentar establecer no más de cinco tabúes para tu mascota.
En la casa podrán aplicarse las siguientes prohibiciones:
- dañar muebles o papel tapiz;
- subirse a la mesa;
- dormir en flores o en la cama, etc.
Para asegurarse de que las sugerencias queden firmemente grabadas en la memoria de su mascota, puede ayudar a evocar recuerdos negativos usando una botella de agua con atomizador.
Cuando un gato intenta violar las reglas vigentes en la casa, el dueño puede, con la conciencia tranquila, rociarlo con agua, recordándole con voz severa que esto no se puede hacer.
En cuanto a los propios animales, reaccionan bruscamente a la entonación.
Además, debes recordar que si el gato ya ha hecho una travesura, entonces no tiene sentido hacer una sugerencia.