Se cree que los perros y los gatos son los primeros amigos de las pulgas. Pero además de pulgas, garrapatas y helmintos, existe toda una galaxia de insectos que parasitan el pelaje de las mascotas.
Si no los conoce, el procesamiento puede parecerle una pérdida de tiempo y dinero.
Además, no hay garantía de que al caminar únicamente por los senderos, su mascota no contraiga ninguna de estas plagas.
1. Pulgas
Estos son los verdaderos líderes del ranking. Las pulgas aparecen en las mascotas no solo desde la calle, sino que incluso pueden ingresar a los apartamentos desde sótanos o áticos. Pero lo aterrador no es que las pulgas piquen y la mascota pique. Los parásitos pueden servir como portadores de enfermedades (brucelosis o peste), así como de helmintos.
2. Garrapatas
Ninguna temporada puede pasar sin ellos. Además, los chupasangres cobran vida con el menor calor. Las garrapatas no son tan activas como las pulgas, pero transmiten enfermedades no menos peligrosas: piroplasmosis, ehrlichiosis, encefalitis. En este caso, el tratamiento capilar por sí solo no protegerá al perro. Se requiere vacunación anual.
3. Ácaro intradérmico
Ataca principalmente a perros que viven en la calle. Los perros pueden picar hasta el punto de inflamarse, pero aún así es difícil detectar la garrapata. Tendrás que llevarlo a una clínica veterinaria y que le raspen la piel.
4. Ácaros del oído
Se encuentra en gatos callejeros o que periódicamente salen a la calle. El parásito está indicado por el nerviosismo del gato y su frecuente rascado de orejas.
5. Vlasoed
Estas plagas viven en la propia lana y generalmente se consideran inofensivas. El daño está indicado por la caída del cabello y la aparición de áreas queratinizadas de la piel. Sucede que llega a la dermatitis, y el perro puede rascarse la zona afectada hasta sangrar.