Un perro aporta a las personas una gran cantidad de felicidad y emociones positivas. ¿Pero está feliz el amigo de cuatro patas?
Después de todo, muchos dueños olvidan que el perro no es una persona y que sus alegrías son diferentes a las humanas.
El animal “habla” constantemente con su dueño sobre su estado, pero lo hace en su propio idioma.
Para saber si su mascota está contenta, debe prestar atención a 5 señales.
Señal 1: orejas sueltas
Un perro feliz tiene las orejas relajadas. Se ubican en la cabeza en posición natural. Este es uno de los signos de un animal tranquilo y contento.
Cuando un perro está triste, sus orejas se levantan notablemente. Cuando las orejas están echadas hacia atrás o tensas debido al hiperalerta, suele ser un signo de estrés o miedo. Es normal que una mascota reaccione de esta forma ante factores externos (sonidos, otros animales, personas amenazantes).
Si está cerca de su amado dueño, relativamente rápido devuelve sus orejas a su posición natural. Si esto no sucede, el animal estará estresado la mayor parte de su vida, lo que significa que no podrá ser feliz.
Segundo signo: intentar captar la mirada de una persona
Un perro feliz es aquel con el que su dueño se comunica constantemente. Un perro así capta constantemente la mirada del dueño y se comunica con él de esta manera. Los criadores de perros experimentados prestan atención principalmente a establecer una conexión con su mascota.
Esto se logra a través del juego, el entrenamiento, la educación cotidiana y la recreación conjunta. Los perros han sido criados durante cientos de años para servir a los humanos, por lo que su mayor felicidad es ser necesitados y sentir una conexión con su dueño. Si un animal se comporta como un gato y “camina solo”, sin prestar atención a una persona, no puede ser feliz.
Tercer signo: mover la cola
Un perro feliz levanta la cola (excepto en razas para las que esta posición no es natural) y la menea. Cuanto más feliz es la mascota, más activamente mueve la cola.
Las razas grandes pueden incluso causar un dolor considerable al golpear a una persona en las piernas. O golpean con fuerza el suelo o los muebles, expresando su alegría.
Un perro asustado, estresado o enfermo tiene la cola que cuelga fláccida o metida debajo del vientre.
Signo cuatro: mostrar tu barriga
Tumbarse boca arriba y mostrar la barriga es el mayor grado de confianza en el reino animal. El estómago es un lugar vulnerable desprotegido con piel fina y sensible. Abrirlo significa ponerse en peligro.
Si tu perro hace esto con regularidad, significa que confía completamente en ti. Y la confianza y la sensación de seguridad son los principales componentes de la felicidad de cualquier ser vivo.
Signo cinco: actividad
Dicen de una persona feliz que su alma canta, quiere bailar y abrazar a todos. Ésta es la reacción del cuerpo a la producción de las llamadas hormonas de la felicidad. El mismo esquema funciona en perros.
Si la mascota está contenta, corre, salta, chilla alegremente, juega activamente con una pelota o simplemente “da fuerte” como un caballo obstinado. Quiere divertirse más y estar activo.
Cuida a tu mascota. Con el tiempo, aprenderá a leer sus estados de ánimo y emociones, tal como él lee los suyos.