Dado que los gatos tienen un sentido del olfato sensible, algunos olores pueden usarse para corregir el comportamiento de las mascotas.
Sin embargo, vale la pena señalar que un enfoque integrado es importante en este proceso. Por ejemplo, si compraste un rascador nuevo para tu mascota y, después de tratarlo con hierba gatera, esperas que el animal deje de rascar los sofás, es posible que tus expectativas no se cumplan.
Si el famoso rascador se tambalea y está bajo, el gato lo evitará de todos modos y ningún olor favorito lo obligará a usar esta incómoda estructura.
Y si una cama para perros o un juego de juegos cumple con todos los requisitos, ¿por qué no intentar atraer la atención de su mascota hacia el nuevo "accesorio" con la ayuda de un olor?
Así, los animales disfrutan verdaderamente de los aromas de melisa, menta, mentol y eucalipto. Lo principal es que apenas son audibles, de lo contrario el resultado será completamente opuesto.
Los aceites esenciales de lavanda, geranio y romero tienen un efecto calmante en las mascotas. De nuevo, en dosis bajas.
Los estimulantes más potentes para los gatos son la hierba gatera y el matatabi.
Si un animal siente amor por las aceitunas, no es de extrañar, porque su olor no deja indiferente a casi ningún gato, al igual que el ámbar de la valeriana.
Un descubrimiento inesperado será el apego de los gatos al olor a lejía o al olor del sudor de su dueño.
Es imposible no mencionar que los animales simplemente disfrutan del olor de su comida favorita.