Todo el mundo tiene que pasar por prueba y error en algún momento, pero lo mejor es aprender de los errores de los demás.
Por ejemplo, la falta de experiencia puede provocar que la tierra del jardín se estropee. Y esto se hará, como siempre, con las mejores intenciones.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea BelNovosti, científica agrónoma y paisajista, nos dijo qué fertilizantes no se deben aplicar en otoño.
Cada propietario decide por sí mismo qué hacer en su sitio, pero estos consejos le ayudarán a ahorrar nervios y fuerzas, ahorrar dinero y no arrepentirse de lo que ha hecho.
Los fertilizantes no son para el otoño.
El primero en la lista es el nitrato de amonio. Este fertilizante, aplicado al suelo en el otoño, puede endurecerse en la primavera.
En primavera, al plantar plántulas u otras plantas, se pueden producir quemaduras en el sistema radicular.
El caso es que se trata de un fertilizante nitrogenado concentrado. No es seguro para las plantas y el suelo.
La urea, el sulfato de amonio y la nitroamofoska tampoco son adecuados para el otoño.
En cuanto a los fertilizantes que no causarán daño, conviene prestar atención al superfosfato o al cloruro de calcio.
De la materia orgánica, puedes agregar estiércol.
Estos aditivos, aplicados en otoño, mejorarán la calidad del suelo, y en primavera no tendrás que volver a aplicar estos fertilizantes.