Los residentes de verano rara vez encuentran problemas al cultivar remolachas. Las principales dificultades surgen a la hora de preparar el suelo para la siembra y aplicar fertilizantes.
De lo contrario, la remolacha es un cultivo sin pretensiones.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea BelNovosti, científica agrónoma y paisajista, nos contó los problemas que surgen al cultivar remolacha.
Debido a ellos, las remolachas se vuelven duras, crecen pequeñas y se almacenan mal.
Primero, el suelo
Si la tierra de su jardín es pesada y muy ácida, antes de sembrar, piense en cómo desoxidar la tierra y aflojarla.
Puede utilizar harina de dolomita, ceniza y se recomienda agregar abono podrido para aflojar la tierra.
En segundo lugar, fertilizar
Cuando aparezcan los brotes, inspeccione las camas y, si encuentra puntas pequeñas, piense en fertilizar.
Se agrega materia orgánica: humus o compost, y los tubérculos se alimentan con infusión de hierbas de remedios caseros.
En tercer lugar, fechas de siembra.
En promedio, se recomienda a los jardineros sembrar remolacha al mismo tiempo que se plantan patatas.
Cuarto, intervalo
Los cultivos de raíces son muy exigentes en cuanto a los intervalos de siembra.
Para evitar el adelgazamiento, siembre las semillas a 10 cm de distancia.
La distancia entre hileras no debe ser inferior a 30 cm.
Quinto, regar
Si el clima es seco, asegúrese de prestar atención al régimen de riego durante el período de formación de las plantas, en junio.