La capa blanca y esponjosa que cubre el mantillo es el hongo Sclerotinia, que destruye las raíces de las plantas en una semana.
La ecologista Lidiya Volkova advierte: “Las esporas son transportadas por el viento y permanecen en el suelo hasta cinco años. Si no tomamos medidas, el hongo se propagará por todo el jardín”.
Los primeros signos de infestación son: plantas marchitas sin razón, “almohadillas” blancas en el mantillo y un olor agrio proveniente de los parterres.

Algoritmo de acciones
1. Retire el mantillo infectado y quémelo.
2. Vierta una solución de yodo sobre el suelo (10 ml por cada 10 l de agua): mata las esporas sin dañar la microflora.
3. Espolvorear el suelo con ceniza (1 taza por m²) para desinfectarlo.
Pavel, un residente de verano de Tver, compartió: “Reemplacé el aserrín con corteza de pino: contiene fitoncidas que suprimen los hongos. ¡Ahora solo lo utilizo para triturar!”
Para prevenirlo, agregue mostaza en polvo (1 cucharada por balde) o polvo de tabaco al mantillo. El estudio Agricultura Ecológica (2023) confirmó que estos productos reducen el riesgo de infección en un 70%.
Si el hongo ya se ha extendido a las plantas, rocíelas con infusión de ajo (200 g por 5 l de agua, dejar reposar durante 24 horas) o una solución de soda (2 cucharadas por 10 l).
Utilice fungicidas químicos sólo como último recurso: matan las bacterias beneficiosas.
¿Cómo restaurar el suelo después de la contaminación? Abono verde vegetal: la mostaza y el rábano liberan sustancias que suprimen la Sclerotinia. Después de 2 meses, desenterrar los canteros y añadir abono.
Importante: nunca utilice estiércol fresco como mantillo: es un “manjar” para los hongos. Elija compost o paja bien descompuestos.
En los invernaderos, ventile la habitación regularmente: la humedad alta provoca brotes de la enfermedad.