La ceniza de madera es un fertilizante valioso, pero debe utilizarse con precaución.
Te contamos qué plantas se pueden alimentar con ceniza, y a cuáles puede perjudicar.
¿Qué se puede y qué no se puede alimentar con ceniza?
La ceniza es adecuada para muchos cultivos de jardín, pero las más apreciadas son las solanáceas y las legumbres.
También puede alimentar pepinos, calabacines, cebollas, eneldo, perejil, zanahorias, rábanos y remolachas con ceniza.
Además, la ceniza se puede aplicar debajo de árboles frutales y arbustos de bayas.
Está prohibido alimentar con cenizas a las plantas que necesitan suelo ácido.
Estos incluyen rododendro, arándano, arándano rojo, arándano rojo, arándano, hortensia, azalea, brezo, cyperus, camelia y lirio de los valles.
Además, a las coníferas y algunas variedades de lirios y rosas no les gusta la ceniza.
Hay que recordar que la ceniza puede dañar incluso aquellas plantas que responden bien a ella.
La ceniza juega un papel negativo cuando se utiliza junto con fertilizantes que contienen nitrógeno.
Además, no se pueden utilizar cenizas si el sitio tiene suelo alcalino.
También hay que tener en cuenta que el efecto desoxidante de la ceniza dura de dos a cuatro años, es decir, su aplicación anual puede provocar la alcalinización del suelo.