Cultivar pimientos en 30 días puede parecer imposible, pero este método de simbiosis levadura-azúcar cambiará tu idea de jardinería.
Todo comienza con la elección de las semillas: las variedades tempranas como 'Gypsy' o 'Atlant' son las adecuadas.
Un día antes de plantar, remojar las semillas en una solución de 1 cucharadita de azúcar, una pizca de levadura cruda y un vaso de agua tibia.

El azúcar actúa como catalizador, despertando al embrión, y la levadura crea un medio nutritivo que acelera la germinación.
Después de 12 horas, las semillas se hincharán y se podrán plantar en tabletas de turba o sustrato de coco.
El suelo debe calentarse a +25 °C: utilice una almohadilla térmica o coloque recipientes cerca del radiador. Los primeros brotes aparecerán en 3 días.
Ahora preparamos el “cóctel de levadura”: disolvemos 50 g de levadura fresca en 1 litro de agua tibia, añadimos 2 cucharadas de azúcar y dejamos fermentar durante 3 horas. Diluir la mezcla en 10 litros de agua y regar las plántulas.
La levadura saturará el suelo con vitaminas B y dióxido de carbono, lo que acelerará la división celular dos veces.
Después de una semana, repita el riego, pero reduzca la concentración a la mitad.
Cuando los tallos tengan 4 hojas verdaderas, trasplanta el pimiento a la tierra, añadiendo un puñado de arena y una cucharadita de cáscaras de huevo molidas en cada agujero. La arena mejorará el drenaje y las conchas protegerán contra las babosas.
Mantener las plantas bajo cubierta de plástico durante los primeros 10 días, manteniendo la temperatura al menos a +22°C por la noche.
Rocíe las hojas con una solución de suero (1:10 con agua) cada 5 días; esto evitará enfermedades fúngicas.
El día 25 después de la germinación, retire las primeras flores: esto redirigirá la energía de la planta al crecimiento del tallo y las hojas.
Hacia el día 30, los arbustos estarán cubiertos de nuevos brotes y los primeros frutos alcanzarán el tamaño de una nuez. Recójalos inmediatamente, sin esperar a que se pongan rojos: esto estimula la formación de ovarios posteriores.
Guarde los pimientos en bolsas de papel a +10 °C, cubriéndolos con hojas de menta para protegerlos del moho.
El método requiere un cumplimiento preciso de las condiciones de temperatura y dosis: cualquier desviación ralentizará el crecimiento.
Si las hojas empiezan a amarillear, lavar la tierra con agua limpia y añadir infusión de ortiga (1 kg de hojas verdes por cada 10 litros, dejar reposar durante 3 días).