No olvide que los arbustos de bayas necesitan nutrientes durante todo el otoño.
Las grosellas no son una excepción.
Solo es necesario determinar correctamente las necesidades del arbusto de bayas para poder proporcionarle los elementos necesarios.
¿Qué alimentación en octubre puede considerarse la mejor para las grosellas?
Potasio
Este elemento es necesario para que las grosellas se recuperen y puedan producir una cosecha decente el próximo año. Una vez cada tres años se acostumbra añadir un litro de ceniza a cada arbusto. Es una buena fuente de potasio.
También en octubre, puedes "deleitar" las grosellas con sulfato de potasio: 20 gramos del medicamento por metro cuadrado serán suficientes.
Superfosfato
Este fertilizante es uno de los más importantes. Gracias al superfosfato, las grosellas pasarán el invierno bien y no sufrirán diversas enfermedades.
Además, la aplicación de superfosfato en otoño mejorará el sabor de las grosellas. Tome una cucharada grande de fertilizante por arbusto.