Cuando se habla de enfermedades de las plantas cultivadas, los jardineros suelen mencionar los tomates y los pepinos. Todo el mundo sabe que después de ellos es necesario restaurar y desinfectar el suelo de vez en cuando.
Está claro que estas no son las únicas plantas que causan problemas a los veraneantes. Pero también me gustaría recordarles el repollo.
La cama después del repollo.
En los viejos tiempos, los jardineros cortaban el repollo y dejaban que los tallos se pudrieran en los parterres.
Pero ahora se dice cada vez más que este enfoque es fundamentalmente erróneo, que los restos de vegetación atraen a roedores y plagas, además de servir como fuente de propagación de enfermedades.
Pero también dicen que los rizomas de la col atraen a las lombrices, lo que aporta muchos beneficios.
Cómo hacer lo correcto
En el parterre del jardín sólo se puede dejar vegetación sana.
Todos los jardineros están familiarizados con enfermedades como clubroot y fomoz.
Después de ellos, no se planta nada de la familia de las crucíferas en el antiguo lecho de coles durante 6-7 años.
Por lo tanto, si el repollo está enfermo, los residentes de verano recomiendan agregar dolomita o tiza a razón de 300 a 450 gramos por metro cuadrado.
Luego, el suelo se siembra con abono verde: avena, altramuz u otros cultivos adecuados.
Estos sencillos consejos ayudarán a detener la propagación de bacterias y hongos.