¿Quieres obtener bayas del tamaño de una cereza de tus grosellas? Luego preste atención al procedimiento de procesamiento a principios de la primavera.
El monofosfato de potasio junto con lejía, vidrio líquido y azufre te ayudarán. Proporcionarán a la planta longevidad y una buena cosecha.
Los jardineros experimentados recomiendan: la poda se puede realizar en otoño, invierno o principios de primavera.
En primer lugar, nos deshacemos de las ramas viejas, así como de las que estén torcidas o dobladas por un tornillo.
En cuanto a la fertilización, en otoño se recomiendan fertilizantes de fósforo y potasio.
Pero también puedes usar un fertilizante complejo común en el hoyo: hacemos un agujero de 10 centímetros en el suelo y vertemos en él una cucharadita de la mezcla.
Hacemos 2-3 agujeros por arbusto. Si el arbusto es joven, dos o tres.
Si aplicó fertilizante de fósforo y potasio en el otoño, una fertilización con nitrógeno en la primavera será suficiente.
También puedes utilizar fertilizantes minerales. Por un arbusto: un puñado de urea. O usaremos nitrato de amonio.
El compost y el estiércol podrido tendrán un efecto beneficioso sobre la planta.
Anteriormente te contamos cómo regar adecuadamente las berenjenas en el calor.