Para que las peonías se deleiten con su floración, es necesario fertilizarlas correctamente.
El enfoque correcto de la fertilización garantiza no solo una floración abundante, sino también la salud de las plantas.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea BelNovosti, agrónoma y paisajista, compartió recomendaciones útiles sobre este tema.
Elegir fertilizantes para peonías.
La elección de los fertilizantes es un punto clave en el cuidado de las peonías. Los fertilizantes orgánicos como el compost y el humus son ideales.
Estas sustancias proporcionan a las plantas todos los nutrientes necesarios.
El nitrógeno, el fósforo y el potasio son los principales macroelementos que necesitan las peonías.
En la primavera, antes de que comience el crecimiento activo, se deben utilizar fertilizantes nitrogenados para promover el crecimiento de la masa verde.
Durante el período de brotación y floración, es necesario aumentar la proporción de fósforo y potasio.
Periodos de aplicación de fertilizantes.
Las peonías se deben fertilizar varias veces al año. La primera alimentación se realiza a principios de primavera, cuando aparecen los primeros brotes.
En este momento, las plantas necesitan nitrógeno para estimular el crecimiento activo.
La segunda alimentación se produce durante la formación de cogollos. Aquí la atención se centra en el fósforo y el potasio, que contribuyen a la formación de botones florales y a una floración abundante.
La tercera alimentación se realiza una vez finalizada la floración. Durante este período, es importante apoyar a la planta para que gane fuerza para el invierno.
Se utilizan fertilizantes de potasio y fósforo, que fortalecen el sistema radicular.
Métodos de aplicación de fertilizantes
Los métodos de fertilización de peonías también tienen sus propias características.
En primavera y verano, se aplican fertilizantes al suelo alrededor del arbusto, teniendo cuidado de no tocar las raíces.
En otoño, se puede utilizar el método de dispersión superficial de fertilizantes para que penetren gradualmente en el suelo con la lluvia y la nieve derretida.
Es importante recordar que el exceso de fertilizante puede dañar las plantas, por lo que la dosificación debe seguir estrictamente las recomendaciones del envase del fertilizante.
Fertilizantes orgánicos y minerales.
El uso de fertilizantes orgánicos como el compost y el humus asegura una nutrición gradual y uniforme.
Las enmiendas orgánicas y minerales juegan un papel importante en el aumento de la fertilidad del suelo.
La materia orgánica, como el compost y el humus, mejora la estructura del suelo, aumentando su porosidad, favoreciendo la retención de humedad y aumentando su capacidad de aireación.
Los fertilizantes minerales que contienen macroelementos como nitrógeno, fósforo y potasio proporcionan a las plantas una rápida absorción de nutrientes, pero requieren una dosificación precisa para evitar efectos negativos en el suelo.
Cantidades excesivas de minerales pueden provocar quemaduras en las raíces y deterioro de la planta.
Cuidar las peonías después de la fertilización.
Después de abonar, es necesario regar periódicamente para que los nutrientes lleguen más rápido a las raíces.
Es importante mantener una humedad moderada del suelo, evitando tanto la desecación como el estancamiento del agua.
El suelo seco evita que las plantas absorban fertilizantes y el exceso de humedad puede provocar la pudrición de las raíces.
Las peonías necesitan un riego equilibrado, especialmente durante el período de crecimiento activo y floración.
Señales de falta y exceso de fertilizantes.
Las peonías pueden indicar falta o exceso de fertilizante.
Las hojas amarillas y el crecimiento deficiente indican falta de nutrientes, mientras que las manchas marrones y los bordes de las hojas secos indican demasiado fertilizante.
El control regular del estado de las plantas permite ajustar oportunamente la dosis de fertilizante y evitar problemas.
Preparándose para el invierno
La preparación de peonías para el invierno es una etapa importante del cuidado.
Al final de la temporada, después de la floración, se realiza el último abono con fertilizantes potásicos y fosfóricos.
Esto ayuda a fortalecer el sistema de raíces y preparar las plantas para el clima frío.
En otoño, también se recomienda cubrir el suelo alrededor de los arbustos con turba o humus, que proporciona nutrición adicional y protege las raíces de las heladas.
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