El árbol del dólar, también conocido como “zamioculcus”, según una versión, debe su nombre a sus hojas que recuerdan vagamente a los billetes de un dólar.
Según la experta de la publicación en línea BelNovosti, la científica agrónoma y paisajista Anastasia Kovrizhnykh , muchos cultivadores de flores eligen esta "mascota verde" en particular debido a los numerosos signos que prometen riquezas inauditas.
Sin embargo, para que las creencias se hagan realidad, la flor debe estar de buen humor, y una maceta correctamente seleccionada juega un papel importante en esto.
Al elegir un contenedor para un árbol del dólar, suponga que su sistema de raíces tiene la apariencia de un tubérculo con raíces gruesas y largas que crecen verticalmente.
De ahí la conclusión: la olla no debe ser demasiado ancha, sino profunda.
Si va a trasplantar una planta joven, busque una maceta que sea 1-2 cm más profunda que la anterior, y para trasplantar una zamioculcas adulta, 3-5 cm.
Pero no hay necesidad de apresurarse a plantar un árbol del dólar de inmediato en una maceta grande; en este caso, no comenzará a echarle raíces, sino a crecer la parte aérea.
Un "componente" obligatorio es el drenaje, que evitará que la flor sufra exceso de humedad.
En cuanto al material, se cree que la opción más adecuada es la arcilla. Una maceta fabricada con este material es suficientemente estable y, además, tiene la capacidad de dejar pasar el aire.
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