Algunos veraneantes prefieren venir a una casa de campo incluso en invierno, si tiene estufa o calefacción.
Pero a veces es imposible entrar a casa porque la puerta de entrada no se abre.
Puede haber varias razones para esto y se pueden utilizar diferentes métodos para resolver el problema.
Veamos este tema con más detalle.
4 razones por las que la puerta no se abre
Aquí hay algunas recomendaciones.
- El castillo está congelado. Se abre con anticongelante o el omnipresente WD-40. También se puede calentar con aire caliente.
- La puerta de madera se hinchó. Tendrás que abrir la puerta con un hacha o un martillo, que deberás introducir en las grietas con una cuña.
- La jamba está torcida. Inserte el hacha entre la puerta y el marco desde arriba y luego muévala gradualmente hacia abajo.
- La cerradura tiene óxido acumulado. En este caso, puede utilizar líquido de frenos, que se rellena con una jeringa. El grafito o WD-40 también ayudarán.