La productividad de las plantas depende en gran medida de cómo el residente de verano ayuda al suelo y de los fertilizantes que aplica.
Algunos veraneantes incluso recurren a preparados artificiales que aportan la cantidad necesaria de microelementos para el jardín.
Al mismo tiempo, el jardinero dedica una gran cantidad de tiempo a combatir las malas hierbas que pueden utilizarse como fertilizante.
Prestemos atención a la opinión del experto de la publicación online Belnovosti y de la agrónoma Anastasia Kovrizhnykh.
¿Cómo se pueden alimentar las plantas?
Algunos jardineros no saben que las malas hierbas, como la ortiga, la quinua y las cochinillas, contienen grandes cantidades de nitrógeno.
Una vez que desaparezca la necesidad de nitrógeno para las plantas, definitivamente necesitarán fósforo y potasio.
En este caso utilizamos raíces de diente de león, acedera y acedera.
Es importante recordar que no arrojamos malas hierbas al jardín en su forma pura; debemos preparar infusiones de hierbas especiales y regar la tierra con ellas.