El geranio es uno de los cultivos favoritos de los jardineros. En primer lugar, su cuidado es bastante sencillo. Y en segundo lugar, florece muy bien y durante mucho tiempo.
Sin embargo, hay casos en que las inflorescencias de una planta son pequeñas, débiles y bastante escasas.
En tales situaciones, los expertos aconsejan recurrir a pequeños trucos.
1. Reorganice periódicamente la flor.
Al mover la planta de un alféizar a otro (aproximadamente una vez por semana), podrá determinar fácilmente el lugar más adecuado para ella.
Donde se sienta más cómodo, la floración será más abundante y exuberante.
2. Después de que se formen los cogollos, pellizque los brotes.
Quitar las puntas de los brotes redirigirá la energía de la planta de la masa verde en crecimiento a la floración.
Todos los nutrientes irán a las inflorescencias y se volverán muchas veces más brillantes, espesas y fuertes.
3. Actualice periódicamente la capa superior de suelo.
Especialmente si en una maceta crecen varios arbustos a la vez.
El caso es que el sustrato se agota con bastante rapidez y las plantas pueden sufrir deficiencias nutricionales.
Al reemplazar de 3 a 4 cm de tierra superficial una vez cada dos meses, puede lograr una magnífica floración de geranios.
Estos consejos son muy fáciles de implementar. No es necesario hacer ningún esfuerzo especial para utilizarlos.
Por lo tanto, todos los jardineros deberían tomar nota de ellos y probarlos al menos una vez con sus mascotas verdes favoritas.