La productividad de las fresas depende no sólo de las condiciones climáticas y de los fertilizantes aplicados.
También es importante el lugar donde se siembra el popular cultivo.
Contrariamente a la creencia popular, no todos los sitios son adecuados para las fresas de jardín.
Los problemas pueden surgir tanto de las plantas vecinas como de la falta de luz solar.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea BelNovosti, agrónoma y paisajista, recordó a los veraneantes tres lugares que nunca se deben elegir para plantar fresas.
Áreas sombreadas
Para su pleno desarrollo y fructificación, los arbustos de fresa necesitan luz solar.
La falta de este último conducirá sin duda a una cosecha pobre y de baja calidad.
Por lo tanto, no conviene colocar fresas de jardín en zonas sombreadas, incluso si hablamos de la sombra creada por las plantas vecinas.
Un error aún peor sería plantar fresas debajo de una nuez. Este "vecino" frena gravemente el crecimiento de las fresas.
Junto a las solanáceas
La “vecindad” con patatas y tomates provoca en la mayoría de los casos una grave caída de la producción de fresas debido a enfermedades.
Por cierto, a las solanáceas no les pasa nada bueno.
Junto a las frambuesas
Si las frambuesas se convierten en "vecinas" de las fresas de jardín, lo más probable es que la primera cosecha pierda frente a la segunda "competencia" por el agua y los nutrientes.
Además, cuando se ubican muy juntas, ambas plantas pueden volverse especialmente vulnerables a las plagas.