Muchos residentes de verano blanquean los árboles solo en primavera. Sin embargo, vale la pena realizar el procedimiento en otoño.
Es recomendable hacerlo en la segunda mitad de esta época del año, una vez finalizada la caída de las hojas y el período de lluvias frecuentes.
Es necesario aplicar una composición de cal a los troncos de las plantas leñosas en octubre o noviembre para lograr varios objetivos.
Sobre ellos habló Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación de la red BelNovosti, agrónoma y paisajista.
¿Por qué blanquear los árboles en otoño?
En primer lugar, el procedimiento protegerá la corteza de los cambios de temperatura.
En segundo lugar, gracias al blanqueo, la planta será mucho menos vulnerable a las plagas.
En tercer lugar, la composición aplicada al tronco protegerá al árbol de la luz solar reflejada.
El último punto al que hay que prestar especial atención es que en invierno lo más probable es que haya mucha nieve en el suelo. Los rayos se reflejarán en esta superficie blanca.
El problema se agravará al comienzo de la primavera, cuando aún persistirá la capa de nieve y aumentará claramente el número de días soleados.
Por lo tanto, el blanqueo de otoño es especialmente necesario si el residente de verano no está seguro de poder visitar la cabaña de verano en febrero o los primeros días de marzo.
El mortero de cal se puede utilizar como composición de cal. Pero si el procedimiento se lleva a cabo a principios de otoño, es mejor usar pintura a base de agua, con la que no sucederá nada terrible incluso durante los períodos de lluvia.