Es posible que comiencen a crecer manzanas podridas en el manzano; el residente de verano se esfuerza por deshacerse de este problema lo más rápido posible.
En la mayoría de los casos, la pudrición interior es un signo de enfermedad; a menudo los frutos sufren clorosis. El síntoma son las hojas pálidas.
Resolveremos los problemas utilizando una solución de hierro; necesitaremos fertilizantes con un alto contenido de hierro.
Este fertilizante se puede adquirir en cualquier tienda especializada. Por ejemplo, tomemos la opción con sulfato de hierro: diluya 150 gramos por cada cinco litros.
Otra enfermedad popular es la moniliosis: un síntoma es que las manzanas se caen o se vuelven marrones.
Para solucionar el problema, necesitamos una suspensión de ziram (50 gramos por 5 litros de agua) y zineb (225 gramos por 5 litros de agua). Hacemos una solución y la usamos.
Esta solución no se debe utilizar bajo la lluvia para evitar que el árbol se queme. Procesamos dos veces con un intervalo de dos semanas.
Si el manzano tiene costra, basta con quitar las hojas caídas del manzano y tratar el árbol con urea (300 g por 5 litros de agua).
