Si se ha decidido retirar de un sitio un árbol viejo o enfermo, entonces debemos recordar que no basta con simplemente talarlo.
Debemos abordar la tarea con responsabilidad para no encontrarnos con otros problemas en el futuro.
El caso es que no puedes dejar el muñón, de lo contrario pronto tendrás que lidiar con el crecimiento.
Pero no siempre es posible quitar el muñón inmediatamente. En este caso, es mejor cortar el árbol más cerca del suelo. Luego, con un destornillador, debes hacer varios agujeros verticales en él.
Se debe verter nitrato de amonio en los agujeros preparados. Lo mejor es hacer esto a través de una regadera con un pico estrecho.
Luego, el muñón debe cubrirse con una envoltura de plástico, pero para estar seguro, dicho "refugio" debe presionarse con piedras.
Como resultado, en un par de años no quedará nada del muñón y, lo más importante, no habrá crecimientos molestos.
Pero vale la pena agregar que periódicamente solo es necesario agregar salitre, lo que destruirá el muñón.