Todo residente de verano experimentado se preocupa por aumentar la productividad: sabe que el agua para riego debe calentarse un poco.
Resulta que el suelo frío reduce la capacidad de las plantas para absorber nutrientes.
Por esta razón, no se debe enfriar el suelo durante el riego; se debe calentar el agua a la temperatura exterior.
Para hacer esto, simplemente llene el tanque por la noche; durante el día se calentará con el sol. Sin embargo, en este caso, el líquido puede comenzar a florecer.
Veamos tres formas de evitar la floración.
- La forma más sencilla es añadir una pequeña cantidad de cristales de permanganato de potasio al barril.
- Es mejor tapar el barril con una tapa para que el agua no quede expuesta al aire ni a la luz solar. Además, la tapa no permitirá que el agua se evapore rápidamente. Es mejor utilizar agua vertida el día anterior lo antes posible.
- Puedes arrojar algunas ramas de plantas acuáticas al agua; la náyade y la hornwort servirán.