A pesar de que la granada creció originalmente en Asia Central, Turquía, Transcaucasia e Irán, ahora se puede encontrar en casi todos los países con clima tropical o subtropical.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea BelNovosti, agrónoma y paisajista, nos contó qué condiciones necesita una granada para crecer y fructificar.
En primer lugar, vale la pena detenerse en una característica como la resistencia al invierno de esta planta.
La granada comienza a congelarse cuando el termómetro desciende por debajo de -18 grados: toda la parte aérea del árbol, hasta el cuello de la raíz, se congela.
Si la temperatura desciende aún más, la parte subterránea de la planta también muere. Por lo tanto, la principal condición que se debe observar al plantar una granada es elegir un área donde la temperatura del aire nunca baje de los -15 grados.
Además de calor, esta planta requiere luz solar, por lo que solo un área soleada es adecuada para plantarla.
Será mejor si logras colocar la plántula en una colina, asegurándote de que el árbol reciba suficiente luz debido a la ausencia de edificios y otros factores de sombra.
Pero la granada no es exigente con el suelo: prefiere suelos arenosos o arcillosos, que deben estar bien drenados, sueltos y saturados de oxígeno, con un índice neutro o ligeramente ácido.