El ajo es un cultivo bastante modesto. Pero, si quieres aumentar la cantidad y mejorar la calidad de la cosecha, entonces conviene realizar varios tratamientos importantes en el primer mes de verano.
Especialmente durante este período, el ajo necesita fósforo, potasio y magnesio.
Puedes utilizar ceniza fresca. Para ello, vierta 9 litros de agua hirviendo sobre un litro de ceniza. Después de 3 días se puede utilizar la infusión, pero primero se debe filtrar. También puedes añadir 150 ml de vinagre.
Se puede sustituir con fertilizantes minerales. Para hacer esto, debes tomar Kalimag o monofosfato. Para un balde de agua de 10 litros se necesitarán solo 30 gramos del medicamento.
Antes de aplicar fertilizante para raíces, es necesario humedecer las camas.
También es necesario rociar con humato de sodio. Este producto te ayudará a almacenar la cosecha durante mucho tiempo.
Además, a la hora de cultivar hay que tener en cuenta que en junio el riesgo de desarrollar mildiú aumenta considerablemente en el caso del ajo y la cebolla.
La primera señal son las hojas amarillas. Puede salvar la situación con una solución de Fitosporin M. El tratamiento se puede realizar cada 2 semanas. El procedimiento debe interrumpirse 14 días antes de la cosecha.