La adquisición de hojas de cebolla en forma de flecha y de un tinte amarillento es una mala señal.
Las plumas de los cultivos de huerta deben ser verdes. De lo contrario, el residente de verano debe actuar urgentemente.
El color amarillento de las partes aéreas de la planta generalmente indica una deficiencia de uno de los microelementos importantes: el nitrógeno.
Un remedio farmacéutico muy conocido ayudará a suplir la escasez de este componente. Estamos hablando de amoníaco.
Cómo convertir el amoníaco en fertilizante
Debe tomar un balde estándar y llenarlo con agua limpia.
En el mismo recipiente se deben añadir tres cucharadas de amoniaco.
Después de mezclar bien, obtendrá un buen fertilizante nitrogenado.
El líquido debe utilizarse para regar los cultivos del jardín desde la raíz. Es recomendable realizar el trámite en horas de la tarde.
Este producto no solo ayudará a devolver el color correcto a las plumas de la cebolla (al reponer la deficiencia de nitrógeno), sino que también hará que la planta sea mucho menos vulnerable a una plaga tan común como la mosca de la cebolla.
Como resultado, nuevamente habrá grandes posibilidades de obtener una cosecha abundante y de alta calidad.