En verano, los tomates necesitan especialmente protección contra enfermedades y plagas.
No debemos olvidarnos de la fertilización, que asegurará la formación de ovarios y frutos fuertes, haciendo que los arbustos sean más sanos y resistentes.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación online BelNovosti, agrónoma y paisajista, explicó en junio cómo procesar los tomates.
Urea
La fertilización de junio proporciona a la planta los nutrientes que intervienen en el crecimiento de la masa vegetativa: se forman cogollos fuertes y, en el futuro, frutos sabrosos.
En junio, los tomates se rocían con una solución de urea: 50-60 g de producto por 10 litros de agua.
Después de que aparecen los ovarios
Durante este período, se hace hincapié en los fertilizantes de fósforo y potasio. El experto aconseja preparar el fertilizante según esta receta: 10 g de superfosfato y 7-10 g de sulfato de potasio por 10 litros de agua.
Oligoelemento valioso
La falta de cobre suele provocar enfermedades en las plantas. El sulfato de cobre es especialmente eficaz cuando el follaje ha comenzado a curvarse.
Pero vale la pena considerar que el sulfato de cobre es un agente bastante picante que, en altas concentraciones, puede dañar la masa vegetativa. Por lo tanto, para pulverizar se utilizan soluciones al 0,1-0,2%: 1-2 g por 1 litro de agua.