La rosa tiene una propiedad, como cualquier planta cultivada: volverse salvaje. En este caso, los árboles frutales producen frutos insípidos. La rosa se convierte en escaramujo.
A primera vista, no hay nada que dé miedo: el arbusto también florece espectacularmente y también produce bayas saludables. Pero la estética sufre.
Le diremos qué se debe hacer para evitar que una rosa varietal se vuelva salvaje.
Razones
- Variedad equivocada.
- Violaciones de las normas de tecnología agrícola.
- Helada.
Este trío de razones convierte una buena rosa arbustiva en una buena rosa mosqueta. Esto no sucede de la noche a la mañana y todo puede cambiar si notas las primeras señales a tiempo.
La rosa se convierte en rosa mosqueta.
Lo primero que delata el inicio de la metamorfosis es el color de las hojas y espinas, así como su tamaño.
Los escaramujos tienen ricos brotes verdes y hojas pequeñas. Las ramas son más delgadas y sus espinas más cortas que las de una rosa.
Las rosas se distinguen por hojas más densas y espinas más grandes. Los brotes tienen un tinte rojizo, son mucho más densos que los del escaramujo y el follaje es más rico.
Prevención
Para evitar que la rosa se convierta en escaramujo, es necesario seguir las recomendaciones para su cuidado.
1. Riegue y afloje la tierra a tiempo.
2. También es importante combatir las malas hierbas, que quitan parte de la nutrición e interfieren con el desarrollo del arbusto.
3. Es importante fertilizar de manera oportuna. Puedes utilizar suplementos minerales y materia orgánica.
4. Habiendo descubierto los primeros signos de cambios, es necesario encontrar los primeros brotes de escaramujo y cortarlos hasta la raíz. Esto se hace con cada nueva sesión. Si la rosa comienza a volverse salvaje, entonces se debe duplicar el cuidado y la atención.