Si decides cultivar sandías en tu propia parcela, podemos desearte mucha suerte y compartirte un diagrama detallado con el que tus acciones estarán abocadas al éxito.
El primer punto de este sencillo algoritmo es aflojar los lechos reservados para plantar sandías.
Una vez completado este paso, haz agujeros en el suelo.
La profundidad de los hoyos de plantación debe ser de aproximadamente 3 cm y la distancia a la que deben colocarse entre sí debe ser de 1 metro.
Ahora es el momento de colocar las semillas en los agujeros, después de lo cual es necesario rociar los granos con tierra.
Al plantar semillas germinadas, se debe actuar con extrema precaución para no romper el brote sin darse cuenta.
Tenga en cuenta: el suelo debe estar húmedo al sembrar. Por supuesto, no conviene hacer un pantano, pero sí es necesario mojar muy bien el suelo. Si el suelo está seco, las semillas probablemente morirán.
Ya solo queda compactar la tierra después de la siembra y volver a regar. Cubra las camas con futuras sandías con una película en la parte superior; no se puede quitar hasta que aparezcan los brotes.