Para que la cosecha dé frutos abundantes, es mejor plantar los arbustos en aquellos lechos que estén bien iluminados por el sol.
Al mismo tiempo, los lechos no deben ubicarse en tierras bajas donde se acumulará agua después de las lluvias. El suelo en un lugar así se seca y se calienta durante mucho tiempo. Esto afectará negativamente al estado de las fresas.
En cuanto al suelo, debe ser fértil. Se puede obtener una excelente cosecha en suelos francos ligeros y medios y franco arenosos.
La acidez del suelo no debe ser demasiado alta. El nivel ideal es pH 5,5-6,5.
Además, al plantar bayas, se deben tener en cuenta las reglas de rotación de cultivos.
Los jardineros experimentados señalan que las legumbres, una variedad de verduras y algunos tubérculos son buenos predecesores de las fresas. Pero es mejor plantar plántulas después del abono verde.
Las fresas no se deben plantar después de las patatas, las calabazas o el repollo. En este caso, no tendrá que contar con una cosecha abundante y de gran calidad.
