Las berenjenas son cada vez más populares en los jardines privados, pero los veraneantes se llevan una sorpresa desagradable: los frutos se vuelven amargos.
A continuación se explicará por qué sucede esto y cómo evitarlo.
¿De dónde viene la amargura?
La berenjena pertenece a la familia de las solanáceas y es un pariente cercano de las patatas y los tomates.
Todos estos cultivos contienen solanina, una sustancia tóxica que está presente en verduras y frutas.
Todo el mundo sabe que no se deben comer tubérculos de patata verdes, ya que la concentración de solanina en ellos es muy alta. Pero incluso en los frutos de berenjena, esta sustancia a menudo excede los límites permitidos, dándoles un sabor amargo.
Si comes grandes cantidades de frutas que contienen mucha solanina, puedes envenenarte. Sus signos son vómitos, diarrea, dolor abdominal, desorientación y pupilas dilatadas.
En caso de intoxicación grave, comienzan las convulsiones y el coma. Es difícil que un adulto sufra una intoxicación grave, ya que tendrá que comer muchas frutas. Los niños, las personas mayores y las mascotas corren un mayor riesgo.
Cómo evitar la acumulación de solanina
En la naturaleza, este alcaloide cumple una función protectora, ayudando a la planta a protegerse de la destrucción de animales, enfermedades y plagas.
Nota: la solanina tiene propiedades insecticidas y fungicidas, por lo que se suele utilizar una infusión de puntas de tomate y patata para pulverizar otras plantas contra enfermedades y plagas.
¿Cuándo acumula una planta más toxinas? Cuando lo amenazan de muerte, es decir, en situaciones estresantes.
Las situaciones estresantes son:
- sequía;
- riego abundante después de la sequía;
- clima caluroso.
La berenjena también acumula solanina a medida que la fruta madura para proteger las semillas de ser comidas por los animales.
Cómo prevenir el amargor
1. Proporcione a las plantas un riego uniforme y frecuente. Este cultivo necesita un suelo constantemente húmedo, por lo que es necesario regar las berenjenas al menos una vez cada 4-5 días, vertiendo al menos 5 litros de agua debajo de la planta.
2. La sombra en climas cálidos no sólo evitará el secado excesivo del suelo y el estrés de la planta, sino que también aumentará la productividad. En climas cálidos, las berenjenas no dan frutos.
3. Quitar los frutos a tiempo permitirá comerlos antes de que acumulen solanina. La mayor cantidad de alcaloide se observa en frutos maduros. Coseche mientras la fruta sea joven.
Nota: si la pulpa es blanca, entonces no contiene solanina o está contenida en una cantidad insignificante. Si la pulpa ha adquirido un color grisáceo, significa que el proceso de acumulación ya ha comenzado.
Para reducir el riesgo, conviene elegir variedades que sean resistentes al amargor. Normalmente el fabricante lo indica en la descripción de la variedad.