Un ambiente patógeno en el suelo es un verdadero desastre para los jardineros y jardineros, que no les permitirá cultivar y cosechar una rica cosecha de verduras y frutas.
La ciencia sugiere combatir los microorganismos mediante métodos químicos y, como alternativa, con abono verde. Lo principal es elegir la cultura adecuada.
Sin embargo, no puedes simplemente tomar y sembrar un cultivo que te aconsejó uno de tus vecinos.
En primer lugar, es necesario tener en cuenta la rotación de cultivos, ya que los cultivos de abono verde también se dividen en familias: crucíferas, cereales, etc., que a su manera afectan la condición del suelo.
Pero existe una opción universal.
En este caso, puede contar con dos efectos a la vez: puede enriquecer el suelo con sustancias útiles y al mismo tiempo desinfectarlo.
Estamos hablando de caléndula, que, entre otras cosas, también se utiliza en la medicina popular.
Esta planta puede hacer frente a los inicios de enfermedades en una sola campaña de siembra.
Por cierto, muchas plagas no digieren crónicamente los alrededores de la caléndula, y todo porque el sistema de raíces de la planta libera sustancias especiales en el suelo.
Con todas estas propiedades positivas, la caléndula es una planta sin pretensiones.