Si aparece musgo verde en una maceta con una orquídea, debe tomar medidas, de lo contrario la situación puede empeorar.
Esta flor a menudo causa problemas a los amantes de las plantas de interior: las raíces se salen de la maceta, los cogollos se caen sin motivo alguno o las hojas se ven algo mal.
Si se nota musgo en la maceta, es mejor no ignorar esta señal. Suele aparecer en la estación cálida.
Hay varias razones para su aparición:
- riego excesivo;
- alta humedad;
- olla demasiado grande;
- suelo compactado.
Con la aparición del musgo pueden producirse cambios negativos. Por ejemplo, una orquídea se marchita, deja de desarrollarse y se seca. En este caso, la planta debe trasplantarse a un suelo nuevo.
El principal motivo de la aparición de musgo es el riego abundante. A la orquídea no le gusta la sequía, pero no debes inundar la planta. Por lo tanto, conviene cuidar el drenaje y los orificios de drenaje de la maceta.
Después del trasplante, la flor debe recibir iluminación difusa. La maceta no tiene por qué ser transparente. Puedes trasplantarlo a uno normal.