Un método para quienes están cansados de combatir constantemente las malas hierbas, pero no quieren utilizar productos químicos agresivos.
Algunos residentes de verano no pueden venir al sitio todos los días. A veces pasan varias semanas entre visitas al jardín.
Durante este tiempo, la hierba puede “asfixiar” la plantación. Especialmente si llovió durante varios días.
Por lo tanto, algunos veraneantes prefieren realizar un trabajo de calidad una vez, en lugar de repetir el mismo trabajo cada dos semanas.
El mantillo solucionará el problema de las malas hierbas durante toda la temporada. Puedes almacenarlo tú mismo o comprarlo.
Los residentes de verano experimentados esparcen mantillo donde las malas hierbas no son necesarias en absoluto. Entonces, primero limpian las camas y los caminos y luego los cubren con cualquier material. Por ejemplo, utilizan la corteza de las coníferas.
En tales condiciones, las malas hierbas no tendrán la más mínima posibilidad. Además, el mantillo retendrá la humedad por más tiempo, por lo que no tendrás que regar las plantas todos los días cuando haga calor.