Si la dracaena, que alguna vez fue exuberante y fuerte, comenzó a marchitarse y morir, entonces no puedes dudar: debes salvar la planta.
En primer lugar, debes verificar el sistema raíz. Lo más probable es que la parte subterránea de la planta haya comenzado a pudrirse.
La razón principal es el anegamiento. Este entorno crea condiciones favorables para los hongos. Es posible salvar a la dracaena de la muerte solo con la ayuda de un trasplante.
Primero debes preparar una maceta y tierra nuevas. Los jardineros recomiendan desinfectar el suelo. Esto se puede hacer congelando, calcinando, cociendo al vapor o tratándolo con una solución de permanganato de potasio.
A continuación, se retira la dracaena del suelo viejo y se lavan bien las raíces. Las partes podridas se eliminan con tijeras de podar. Recorta 2-3 cm más de lo necesario.
Entonces necesitas desinfectar las raíces. Para hacer esto, prepare una solución de permanganato de potasio: 1 g del producto por 3 litros de agua. Después de la desinfección, las áreas cortadas se tratan con ceniza de madera. A continuación, solo queda trasplantar la dracaena a un nuevo lugar y regarla.