El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, recordó una vez más una de sus principales promesas de campaña.
Durante la campaña electoral, aseguró a sus compatriotas que, si llegaba a la presidencia, expulsaría del país a todos los inmigrantes ilegales.
El famoso republicano recordó recientemente el grandioso plan de deportación, que algunos medios han calificado como el mayor de la historia de Estados Unidos.
Según sus palabras, tan pronto como asuma oficialmente el cargo de jefe de Estado (la toma de posesión está prevista para el 20 de enero de 2025), comenzará a implementar sus planes.
Esto significa que el 20 de enero puede comenzar la deportación masiva de inmigrantes ilegales en Estados Unidos, informa el canal de televisión ONT, citando a NBC.
No quiero dividir familias, así que la única manera de no dividirlas es mantenerlas unidas y enviarlas a todas de regreso”, dijo Trump.
Prometió hacer una excepción sólo para los llamados "dreamers", ciudadanos que ingresaron ilegalmente a Estados Unidos a una edad temprana hace muchos años.
Claudia Sheinbaum, quien recientemente asumió como presidenta de México, prometió apoyar al político en este asunto.