El siglo XXI es un siglo de estrés, competencia, altas velocidades y carreras constantes por el éxito.
Es por eso que muchos se esfuerzan por ser lo más productivos posible.
Sin embargo, no todo el mundo lo consigue. Aquí, como en muchos otros ámbitos de nuestra vida, hay sutilezas y matices. ¿Cuáles son entonces los secretos de las personas productivas?
Curso claramente marcado
Uno de los principales secretos de las personas productivas es que tienen muy claro lo que quieren. Cuando el objetivo está claro, sólo queda avanzar hacia él.
Desafortunadamente, la mayoría de las personas no han decidido su propio vector de desarrollo y simplemente se dejan llevar por la corriente.
Como resultado, logran resultados promedio, eligen un trabajo estable pero que no les gusta y viven tranquilamente, sin grandes éxitos ni sobresaltos. Una vida así es predecible, conveniente, pero ciertamente no trae felicidad.
Correcta organización del tiempo.
Las personas exitosas y productivas no sufren tonterías como discutir la vida personal de los demás, envidia y vigilancia maníaca de los logros y éxitos de otras personas.
Consideran que todo es una pérdida de tiempo. Las personas productivas simplemente reconocen el valor del tiempo y lo dedican a cosas más importantes y útiles.
Sin miedo a la opinión pública
Las personas productivas no se preocupan por lo que los demás piensen de ellas. Simplemente hacen su trabajo, inspirándose y disfrutando de ello.
El miedo a la opinión pública no los limita y esa libertad les permite crear obras maestras. Y ni siquiera la crítica más devastadora los desviará. Realmente vale la pena aprender estas cualidades, esta “piel dura”, de personas productivas.
Confianza
Las personas productivas tienen tanta confianza en sí mismas que ningún estándar social puede afectar su autoestima.
Reconocen plenamente su singularidad y están orgullosos de ello. Y esto les permite no desperdiciar energía en competencias sin sentido.
Prefieren invertirlo en actividades productivas destinadas a lograr objetivos grandes y ambiciosos.
Amor por el mundo
A primera vista, las personas productivas pueden parecer insensibles y egoístas. En realidad no son así.
Aman este mundo, y el mundo a menudo también los ama a ellos. Y a aquellos que están en armonía con el universo les resulta más fácil alcanzar el éxito y ser verdaderamente felices.
A través de sus actividades, las personas productivas no sólo satisfacen sus deseos y necesidades, sino que también hacen que el mundo sea, al menos un poquito, mejor.
Descanso adecuado
Las personas productivas saben descansar adecuadamente, en beneficio del alma y del cuerpo. No dedican su tiempo libre a ir a bares ni a tumbarse en el sofá viendo la televisión. Prefieren actividades meditativas y de limpieza como nadar, andar en bicicleta o caminar en la naturaleza.
Como resultado de ese descanso, el sistema nervioso, cansado durante la última semana laboral, se reinicia y le vienen a la mente pensamientos verdaderamente brillantes.
Si sigue estas recomendaciones, podrá volverse mucho más productivo y exitoso y, lo más importante, más feliz.
Anteriormente hablé de por quélos ricos piensan de manera diferente.