Los radiadores de calefacción son dispositivos que no pueden faltar en un apartamento.
Es imposible prescindir de ellos, porque es gracias a la batería que la habitación está cálida en invierno, finales de otoño y principios de primavera.
Sin embargo, el problema es que un dispositivo que cumple una función práctica importante a menudo estropea el aspecto de la habitación.
Sin embargo, hay varias formas de transformar un radiador de calefacción de un "enemigo" en un "asistente" del diseñador.
Yulia Tychino, experta de la publicación de la red BelNovosti en el campo del diseño e interiores, nos contó qué hay que hacer con la batería para que se convierta en una decoración para el salón o el dormitorio.
Primera opción
Necesitamos hacer que el radiador de calefacción luzca más brillante.
Este resultado se puede lograr pintando el dispositivo.
Basta con cubrir el radiador con pintura del color deseado, y un feo dispositivo de calefacción se convertirá en un detalle interior importante, que combinará perfectamente con otros objetos de la habitación.
Segunda opción
No todo el mundo quiere pintar el radiador de su calefacción. Y esto es comprensible: el procedimiento requiere mucho tiempo y esfuerzo.
Por tanto, merece la pena prestar atención a otro método. Estamos hablando de “enmascarar” la batería.
Ocultar el radiador es muy fácil. Para ello, basta con utilizar una mampara decorativa.
Gracias a este dispositivo, la batería ya no se notará, pero seguirá cumpliendo su tarea principal: calentar la habitación.
Cualquiera de los métodos anteriores hará que la habitación sea hermosa y acogedora.