Una habitación infantil suele presentarse en rosa para la niña y azul para el niño, como si no existieran otras soluciones.
De hecho, la paleta es más amplia y hay muchas combinaciones, solo que las mamás y los papás piensan en estereotipos y cometen errores banales.
Aquí tienes los mejores colores y opciones para combinar varios colores en una habitación.
Antes de comprar pintura o papel tapiz, debes considerar:
- género del niño;
- su edad;
- preferencias y características personales;
- la ubicación de la guardería en relación con los puntos cardinales y el nivel de iluminación;
- dimensiones de la habitación;
- color de los muebles.
De lo contrario no debería haber ningún problema.
Blanco
Se considera una opción universal para resolver un problema urgente. El color tiene un efecto beneficioso sobre el estado de ánimo, además mejora la iluminación y combina bien con otros colores.
Rojo
Activa el cerebro, mejora el estado de ánimo, pero en cuanto a descanso y relajación esta es la peor opción. Es mejor decorar con acentos en rojo: cortinas, jarrones, lámparas de mesa, etc.
Naranja
Promueve la creatividad y la autoestima, mejora el estado de ánimo y el apetito. El color amarillo es ligeramente similar a él, lo que, según los tonos, mejora la atención y aumenta la actividad.
Verde
Promueve la relajación. Una persona siempre se siente segura en una habitación verde. Pero esta opción no es apta para niños lentos y tranquilos; es mejor combinarla con otros colores.
Azul
Te ayuda a relajarte, pero no te permite concentrarte. Es mejor no decorar el área del escritorio con este color: el niño estará en las nubes.
Azul
Tiene un efecto beneficioso sobre la calidad del sueño y alivia la fatiga, pero si todo está decorado en azul, puedes llevar a una persona a la depresión.
Violeta
Adecuado para personas creativas y soñadores, pero esta misma cualidad puede causar daño. Es mejor utilizar tonos claros que profundos.
Gris
Es aburrido y monótono, pero calma e inspira confianza. Se puede combinar con otros colores.
Negro
Pero este color no es recomendable para una habitación infantil. Y si un adolescente decide agregar un par de elementos negros al interior, los padres deberían observar más de cerca su comportamiento.