Durante la temporada de invierno, a muchas personas les gusta comer comida deliciosa y sentarse debajo de una manta con una taza de cacao; no es sorprendente que el exceso de peso esté ganando rápidamente.
Según algunos expertos, en otoño e invierno el peso corporal aumenta al menos un 5%.
Esto sucede debido a la fisiología del cuerpo: durante la estación fría, el cuerpo acumula tejido graso debido a la falta de calor y luz solar.
Si no quieres ganar peso, primero debes pensar en ropa abrigada.
¿Qué más hay que hacer?
Evidentemente, es necesaria una actividad física regular en forma de aparatos de ejercicio; también puedes simplemente dar largos paseos.
Pero se debe prestar especial atención a la dieta, que debe incluir más proteínas.
Resulta que se pueden comer carnes magras, pescado y productos lácteos bajos en grasa. También se permiten batidos de proteínas.
Continúe incluyendo verduras, frutas y verduras en su dieta; las comidas deben tomarse de 4 a 6 veces al día.