Los profesionales de la limpieza nunca le dirán lo más importante: sus productos de limpieza de suelos “exclusivos” son un mito.
El brillo perfecto del parquet o de las baldosas no se consigue con un gel de 1000 rublos, sino con... hojas de té negro comunes.
Sí, el mismo que quedó después del té de la tarde.

La infusión de té negro contiene taninos, que crean una película invisible sobre la superficie del suelo. Repele el polvo y enmascara pequeños arañazos.
Simplemente vierta 3-4 bolsitas de té con un litro de agua hirviendo, deje enfriar y luego limpie el piso con un paño empapado en la infusión. Sin rayas, solo brillo de espejo.
Para el laminado, agregue 1 cucharada a la solución. yo. aceite vegetal – “sellará” las juntas.
Si el suelo está muy sucio, añadir 2-3 gotas de aceite esencial de limón o eucalipto a la infusión. Potenciarán el efecto antibacteriano y dejarán un ligero aroma. Lo principal es no exagerar con la concentración, de lo contrario el aceite hará que la superficie quede resbaladiza.
Y recuerda: el método del té no es adecuado para parquet de color claro: pueden quedar marcas amarillentas.
Para estos casos, sustituye el té negro por té de manzanilla: es más suave y no mancha la madera.
Las hojas de té no son el único ingrediente “secreto”.
Por ejemplo, para suelos de piedra, utilice agua con vinagre blanco añadido (1 vaso cada 5 litros). Esto eliminará las rayas y evitará que aparezcan manchas blancas de sal.
Y para las alfombras, espolvoree sal fina, déjelas reposar durante una hora y luego aspire: el pelo se volverá más brillante y los olores desaparecerán.