Tu refrigerador, tu lavadora e incluso el cargador de tu teléfono hacen que el medidor gire más rápido.
Pero hay una manera de reducir los pagos en un 50%, y es completamente legal. Se trata de un "consumo fantasma".
Consumo de energía fantasma
Los dispositivos en modo de espera consumen hasta un 30% de energía. Por ejemplo, un televisor con la pantalla apagada “consume” hasta 20 vatios por hora, según diversas fuentes.

Es fácil calcular cuánto será esto por día, por mes y por año.
Otro secreto es el tiempo de uso. Encienda el lavavajillas y la caldera por la noche, cuando las tarifas son más bajas.
Cómo parar un contador sin imanes y métodos prohibidos
Es muy sencillo: instala sensores de movimiento para encender y apagar las luces, por ejemplo, en el pasillo y el baño.
Reducirán el consumo un 15%. Reemplace las bombillas incandescentes por bombillas LED: esto le permitirá ahorrar un 20% más.
Pero el principal enemigo son los electrodomésticos viejos. Un refrigerador viejo, y estos son modelos con más de 10 años, consume el doble de energía.
Intente reemplazar estos electrodomésticos y equipos con productos de clase A++ y ahorrará una cantidad considerable de dinero al año en facturas de servicios públicos.
¿Qué pasa con los cargadores?
No los dejes enchufados: desperdician energía incluso sin estar conectados a tu teléfono. Utilice enchufes con interruptor: con un solo movimiento desenergizará todos los equipos.
¿Pero qué hacer si no hay dinero para comprar nuevos equipos?
Realizar una auditoría e identificar desperdicios de energía. Apague cualquier dispositivo que esté en modo de suspensión o que tenga una luz de temporizador.
Quizás te sorprenda, pero incluso un microondas con temporizador es una fuente de fugas.
Y recuerda: el ahorro empieza con los hábitos.
Apaga las luces, hierve sólo la cantidad de agua necesaria y descongela el refrigerador a tiempo. Estas pequeñas cosas salvarán tu presupuesto y el planeta.