¿Tira usted las cáscaras de plátano y de huevo? ¡En vano! Estos “residuos” convertirán tu suelo en un paraíso para las plantas.
Los aficionados a la agricultura ecológica saben de qué estamos hablando.
Trucos para la cabaña de verano
Las cáscaras de plátano enterradas en una maceta se descomponen, liberando potasio y magnesio, elementos esenciales para la floración.

Y las cáscaras de huevo trituradas reducen la acidez del suelo y repelen las babosas.
Pero hay un matiz: la cáscara hay que lavarla para eliminar los químicos y secarla, y la cáscara hay que cocerla en el horno para matar las bacterias.
Otro secreto es el té utilizado. Añádelo al suelo para violetas o helechos: el tanino fortalecerá las raíces.
Y los posos de café aflojarán la tierra, pero sólo para las plantas que prefieren el suelo ácido: azaleas, hortensias.
Sin embargo, no hay que exagerar: el exceso de materia orgánica atrae a los mosquitos. Espolvorea la superficie del suelo con arena y las plagas desaparecerán.
Y si el suelo está cubierto de una capa blanca, no es moho, sino sales del agua.
Replantar la planta, cambiar la capa superior de tierra y regar sólo con agua filtrada.
Para ayuda de emergencia, coloque una tableta de carbón activado en el suelo: absorberá las toxinas.
Pero el suelo ideal no es sólo materia orgánica.
Para los cactus, agregue perlita o vermiculita al suelo: retienen la humedad pero evitan que las raíces se pudran.
Para las orquídeas, mezcle corteza de pino, musgo sphagnum y virutas de coco: este sustrato "respira".
Y si tienes un ficus que no crece, reemplaza los 3 cm superiores de tierra con una mezcla de tierra de hojas y humus.
Y recuerda: el suelo envejece. Cámbiala por completo cada 2-3 años, incluso si no trasplantas la planta a una maceta más grande.
El suelo viejo pierde nutrientes y acumula sales.
Y para la alimentación, utilice no sólo fertilizantes comprados en la tienda, sino también infusiones “caseras”: ortiga, diente de león, cáscara de cebolla.