Mucha gente no puede imaginar el Año Nuevo sin sándwiches con caviar rojo.
Este aperitivo ha adquirido desde hace mucho tiempo el estatus de plato de “Año Nuevo”, junto con Olivier y las mandarinas.
Sin embargo, existe un problema: comprar caviar rojo auténtico y de alta calidad no es tan fácil.
Existe la posibilidad de “toparse” con un producto falso o imitado.
Lo más interesante es que dicho caviar puede resultar muy similar al "original".
Mucha gente está muy contenta con esta imitación: el sabor y la consistencia son casi iguales a los del caviar real.
Sin embargo, hay gourmets exigentes que quieren consumir productos exclusivamente naturales. Estos amantes de la comida deberían prestar atención a una sencilla prueba.
Prueba para determinar caviar real o de imitación.
Debe tomar un recipiente pequeño pero lo suficientemente profundo, ponerle un poco de caviar y verter agua hirviendo sobre él.
El producto natural se “comportará” de la siguiente manera: comenzará a desprender escamas blancas.
El hecho es que el caviar real contiene una proteína que se coagula cuando se expone a altas temperaturas.
Pero si viertes agua caliente sobre una imitación o un caviar rojo falso, no verás escamas. El líquido puede tener un ligero color. Quizás aparezcan “manchas” de grasa en la superficie del agua. Pero no quedarán grumos blancos.