Incluso con un cuidado cuidadoso, los cubiertos acumularán una capa de suciedad y restos de comida con el tiempo.
Ante tal situación, tienes tres opciones: desesperarte y rendirte, comprar un nuevo juego de tenedores y cucharas, o probar un método rápido y eficaz que devolverá el brillo a los cubiertos.
Si decides optar por esta última opción, que sería lo lógico, empieza por preparar una solución limpiadora.
Se compone de 2 litros de agua caliente y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio. Revuelva bien la solución para que el refresco se disuelva por completo.
Para mejorar las propiedades de la solución limpiadora, agregue 2 cucharadas de sal de mesa y 1 cucharada de ácido cítrico.
Pero en esta etapa, la solución debe mezclarse nuevamente y luego colocar en ella los dispositivos contaminados.
Asegúrate de que el líquido los cubra por completo. Los cuchillos, tenedores y cucharas deben permanecer en la solución durante aproximadamente media hora, después de lo cual se deben limpiar con una esponja suave y enjuagar con agua corriente limpia.
Este método se puede utilizar para dispositivos de acero inoxidable, aluminio y cuproníquel.