Si tienes hijos, lo más probable es que hayas tenido que lidiar con la necesidad de limpiar dibujos de las paredes.
Para aplicar patrones, los artistas jóvenes pueden utilizar bolígrafos, rotuladores, pinturas y, en general, cualquier cosa que tenga a mano.
No te apresures a castigar al inquieto: en su lugar, dale un trozo de papel para que dibuje, luego toma una esponja de melamina y ponte manos a la obra.
Este producto ayudará a eliminar los "rastros de un delito". El producto se vende en cualquier ferretería, es económico y ha demostrado su eficacia más de una vez.
Todo lo que tienes que hacer es protegerte las manos con guantes de goma, mojar la esponja y limpiar con ella las manchas de la pared.
Puede que pases más de 5 minutos limpiando, pero tarde o temprano conseguirás eliminar la suciedad.
Otra forma es utilizar pasta de dientes. Aplícalo sobre la tela y limpia las marcas del marcador. La pasta se puede utilizar pura o diluida con agua.
Una vez que el producto de cuidado bucal esté en la pared, espere de 10 a 15 minutos y luego frote la pasta con movimientos circulares. Finalmente, retíralo con un paño húmedo.